Son muchas las personas que practican algún deporte de forma regular, y no solo nos referimos a los deportistas de alto rendimiento, sino también a aquellos que, por ejemplo, salen a correr unos 10 kilómetros un par o tres de veces a la semana. Gran parte de ellos lo hacen sin la supervisión de un fisioterapeuta especializado en fisioterapia deportiva y no saben las consecuencias que esto puede desencadenar.
El deporte tiene muchos beneficios en el cuerpo para prevenir patologías muy diversas como la obesidad, la diabetes o la hipertensión, además protege nuestro sistema locomotor y reduce el estrés y el insomnio y ayuda a aumentar la autoestima. Aunque, la práctica de deporte también tiene su parte negativa: las lesiones. Las lesiones provocarán en menor o mayor grado que el deportista deba evitar cierto tipo de ejercicio durante un tiempo determinado.
Por eso es importante realizar un buen programa preventivo durante el proceso de entrenamiento. Debemos anticiparnos a la lesión y si aparece, ayudar a volver a la actividad deportiva lo más pronto posible.
Causas de las lesiones
Hay diferentes factores que pueden provocar o aumentar la posibilidad de padecer una lesión. Podemos dividir estos factores en tres grupos: los predisponentes, los extrínsecos y los precipitantes.
- Los factores predisponentes son los físicos propios del deportista, como una mala preparación, falta de estiramientos y calentamiento, el cansancio o una mala nutrición.
- Los factores extrínsecos son externos al deportista, como el material que se utiliza para la práctica del deporte o las propias características de este.
- Los factores precipitantes pueden ser traumatismos, malos gestos realizados o sobreesfuerzo antes, durante o después del ejercicio.
Tipos de lesiones
En cuanto a tipos de lesiones, se podrán clasificar en tres grandes grupos: las lesiones musculares, las lesiones articulares y las lesiones tendinosas.
- Las lesiones musculares son las más comunes entre los deportistas, la mayoría de las veces el deportista habrá pasado previamente por alteraciones musculares como agujetas, rampas o calambres, contracturas o sobrecargas.
Encontramos tres lesiones musculares: la distensión o elongación muscular, la rotura fibrilar y la rotura total.
- Otro tipo de lesión son las lesiones articulares, las cuales podemos englobar en dos grandes grupos las capsulitis o artritis, inflamaciones de la articulación o de la cápsula que las envuelve, y las luxaciones, pérdida de contacto entre dos huesos de la misma articulación.
- El último tipo de lesión que encontramos son las lesiones tendinosas que pueden ser o bien tendinopatías o roturas. Estas últimas poco frecuentes ya que afecta todas las fibras de un mismo tendón.
Todos los deportistas deben tener muy presente la importancia de la prevención de lesiones así como una buena rehabilitación si han padecido una. Es bueno que acudan a un fisioterapeuta deportivo, ya que no solo trata lesiones, sino que también juega un papel importante en el trabajo preventivo y de readaptación.